Son auténticas armas letales. Si usted quiere que alguien desaparezca del mapa, estos mercenarios deben ser su elección. En su último trabajo deben ir a una isla perdida de la mano de Dios, gobernada con mano dura por un dictador y un ex agente de la CIA que quiere hacer dinero allí. Casi sin armas, con pocos hombres y nulas esperanzas de supervivencia deben afrontar el trabajo… por algo son los mejores.
Sabemos como empieza, sabemos como acaba y casi casi como van a suceder los acontecimientos en LOS MERCENARIOS (más acertadamente hubiese sido ´LOS PRESCINDIBLES´). Stallone coge los elementos básicos del cine de acción palomitero de los 80 y los traslada al siglo XXI con bastante acierto. Una pena que no se hubiese currado el guión. Si hubiese sido un poco más completo nos habríamos rendido a sus pies.
Al menos tenemos escenas de acción muy logradas, como la huída de la isla o casi todo el tiroteo final. Stallone da su momento de gloria a cada miembro del reparto que, siendo tan numeroso, era fácil que se le escapase algún nombre. Los Stallone, Statham, Li, Crews, Couture, Rourke y Austin tienen su momento para lucir músculos y pegar tortas a cascoporro.
Puerta abierta incluso, por si el film funciona (que parece que lo está haciendo) hacer caja con una segunda entrega donde no pueden faltar Van Damme o Steven Seagal. Dos míticos a los que se echa en falta.
Pero si una escena merece la pena es aquella que reune a los que probablemente en su momento fueron los tres más importantes en el cine de acción de los 80, haciendo de mandamases. Hay colegueo, hay buen rollo y eso se nota.
Mucha acción, mucha violencia, muchas persecuciones y más disparos. LOS MERCENARIOS es la película de acción del verano. ¿Es el equivalente masculino de SEXO EN NUEVA YORK/CREPUSCULO? puede ser, al menos te diviertes de lo lindo.
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