En Charlestown, una pequeña zona de Boston, ocurren con mucha frecuencia atracos a entidades bancarias por grupos muy bien organizados. Claire es una empleada de banco en estado de shock. El banco en el que trabaja acaba de ser atracado. Un día en una lavandería conoce a un desconocido del que se enamora. Lo que no sabe es que este desconocido es el cabecilla del mejor grupo de atracadores de bancos.
Las dos caras de la misma moneda se dan cita en THE TOWN: CIUDAD DE LADRONES. Por un lado nos encontramos con el Ben Affleck actor, al que todos conocemos. Tipo límitado, que en este caso se ciñe a un prototipo de personaje tampoco demasiado complicado y pelín trillado. Affleck no se desenvuelve mal, pero tampoco es precisamente un portento. No paro de pensar en que habría hecho en su papel, por ejemplo, Ryan Gosling (más dinámico, más carismático).
Pero por otro lado nos encontramos al Affleck director, de pulso tranquilo y capaz de rodar escenas de acción conseguidas. Incluso toquetear la imagen y colarnos alguna escena chula en blanco y negro. También tenemos la sensación del pueblo de Chalestown. Es decir, el Affleck director no fue cosa de un día, aquí hay talento y con un buen guión hace films competentes y con estilo.
Además reune un buen reparto encandilado con la historia. Los Rebecca Hall, Jon Hamm, Jeremy Renner, Blake Lively, Pete Postlethwaite, Chris Cooper (pelín desaprovechado) funcionan perfectamente.
Inevitablemente se os vendrá a la cabeza HEAT, la madre de todas las películas de atracos. Hay escenas semejantes, y ritmo parecido pero son otros tiempos y, aunque no está a la altura, THE TOWN funciona perfectamente, entretiene de lo lindo y además da la sensación de buena película. Y eso en estos tiempos es mucho.
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