Joaquin Phoenix siempre fue un actor peculiar. Tras la filmación de la película TWO LOVERS, confesó sentirse cansado del mundillo cinematográfico y decidió abandonar el mundo de la interpretación para dedicarse en exclusiva a su faceta de cantante de Hip Hop.
Lo que parecía una tomadura de pelo comenzó a tornarse en realidad cuando, en sus escasas apariciones en los medios, Phoenix mostraba un comportamiento errático, extraño y arisco.
Y es en la actuación de Phoenix donde reside la verdadera fuerza del film. La idea, ya de por si original, le abre un mundo de posibilidades a un actor de tantísimos registros como él, cuyo Commodo de GLADIATOR aún permanece en mi memoria.
Memorable su aparición en el programa de Jay Leno absolutamente colgado y más bien poco sociable. Finalmente se descubrió que el asunto no era más que un falso documental, filmado por su cuñado Casey Affleck, que siempre le acompañaba cámara en mano.
Lo que para algunos resultó una broma pesada mostrada en el Festival de Venecia y, esencialmente, por que en el film nos encontramos desnudos, drogas y a Joaquin Phoenix teniendo sexo oral.
Hay que aplaudir la valentía de dos jovenes intérpretes y, sobre todo, la valentía de Phoenix por destruir su mundo y escandalizar a la prensa de esa manera. Una idea original, bien explorada y llevada al extremo. Quizás un pelín pesada, pero hasta se la puede perdonar. Phoenix hace una interpretación memorable, que será más recordada por la broma que fue que por la lección interpretativa de este genio.
Y me extrañaba muchísimo su estreno en España, nunca pensé que llegaría a los cines un film como éste, difícil de vender y con poco público para atraer. Es decir, que el proyecto está rodeado de valientes vaya.
Comentarios
Post relacionados
