| Noche de Cine

Vuelve Po, convertido en el guerrero del dragón y dispuesto a proteger el valle de la paz junto a sus inseparables amigos, los cinco furiosos. Po se verá amenazado por un nuevo villano, que planea usar una imparable arma secreta para conquistar China y destruir, de ésta manera, el Kung Fu. Po debe hacerle frente, pero ¿cómo se puede parar un arma que puede destruir el Kung Fu?.

Curioso. Hace unos años aparecía en la cartelera ‘Kung Fu Panda’ y, metiéndome al cine sin ninguna esperanza, me encontré con una peli realmente entretenida que contaba además con un par de lecciones morales muy importantes escondidas entre tanta patada y puñetazo. Dreamworks me había sorprendido gratamente y, a partir de ésta, ha sufrido un auge en cuanto a propuestas de animación.

Y es justo llegar la secuela, más esperada que la primera… y encontrarme con el efecto contrario. Nos encontramos con la perdida de sorpresa inicial: ahora ya sabemos de lo que adolece el panda, ya sabemos lo que puede y no puede funcionar y lo peor de todo es que encima la historia no acompaña. Demasiado mística que, por intentar ser sorpresiva e innovadora, se vuelve pelín aburrida.

Hay luchas. Hay acción y, seguramente, los más pequeños de la casa disfruten con la continuación de las aventuras del panda, pero probablemente para los más mayores pase sin pena ni gloria. Será una más, resultando ser simplemente entretenida.

Quizás lo más reseñable es la labor de Florentino Fernández en la versión doblada por dar voz al Panda. Los paisajes en 2D muy bonitos, pero tampoco memorables. El resto es más de lo mismo, intentando ser hinchado para triunfar en la taquilla. Entretenida sí, pero mucho menos imaginativa. Esperaba un poco más.

Lo Mejor: Algunas secuencias de acción, realmente logradas.

Lo Peor: Se vuelve pesada en algunos momentos de su metraje.