Este verano hemos podido ver en la cartelera el filme ‘Caballeros, princesas y otras bestias’ una comedia que pretende ser una parodia de las películas clásicas de género fantástico y aventuras.
El filme narra las aventuras de dos príncipes. Por un lado nos encontramos con Fabipus (James Franco), el perfecto hermano mayor y heredero al trono que ha triunfado en innumerables gestas, consiguiendo la admiración y el respeto de su pueblo y el amor de su hermosa prometida Belladona (Zooey Deschanel), una joven virgen a la que el mismo rescato. Y en la cara opuesta tenemos a su hermano menor, Thadeous, un segundón que ha vivido siempre bajo la sombra de su hermano mayor llevando una vida de cobarde, dedicada a fumar hierba, beber alcohol y seducir doncellas. Cuando el malvado mago brujo Leezar (Justin Theroux) rapta a Belladona para cumplir una terrible profecía, el holgazán Thadeous es obligado por su padre a acompañar a su hermano en el rescate de su prometida, en una aventura llena de peligros y terribles criaturas, en la que se encontrarán con la misteriosa Isabel (Natalie Portman), una guerrera con un peligroso objetivo.
He de reconocer que lo que más me llamó la atención de esta película fue el reparto. Tenía curiosidad por ver a Zooey Deschanel, Natalie Portman o James Franco en una película de semejantes características. Después de verla, también tengo que confesar que los nombres de los actores me parecen lo más reseñable, por no decir lo único. Todo lo demás sobra.
El filme, clásica comedia veraniega, para mí ha fallado en lo principal: el humor. Una parodia que recurre constantemente a tópicos del género fantástico (brujos, doncellas vírgenes, enanos de las montañas…) y se limita a tirar del chiste fácil y del humor obsceno con constantes referencias sexuales, típicas de cualquier película americana para preadolescentes.
La película cuenta también con sus propios efectos especiales, muchos de ellos elaborados de forma cutre apropósito (espero) y que no conseguían aportar a la película ni un toque de espectacularidad. Además, por si fuera poco, incluye un innecesario número musical por cortesía de James Franco y Zooey Deschanel.
En definitiva, el filme puede resultar entretenido a mentes inmaduras, pero no os dejéis llevar por los nombres de los actores, después de verla sólo te preguntas cómo les convencieron para aceptar semejante papel.
Lo peor: Todo.
Lo mejor: La polémica del desnudo de la doble de Natalie Portman.