El veterano sheriff Roy Pulsifer está al mando del Departamento de Policía Mortal vigilando que todos los demonios terrestres no lleguen a escaparse del Juicio Final. La existencia pacífica de Roy se ve alterada cuando se ve obligado a trabajar con un nuevo y prometedor compañero, el detective Nick Walker, recién llegado del mundo de los vivos. Pronto tendrán que solucionar sus diferencias para detener a unas almas peligrosas que no aceptan el más allá y que se quieren apoderar del planeta.
¿Recuerdan el primer ‘Red’? Pues lo firmaba Robert Schwentke, el mismo que se encarga de ‘R.I.P.D. Departamento de Policía mortal’ aunque, en esta ocasión, parezca un bisoño Director recién llegado.
Si han visto ‘Men in black’, deberían ahorrarse la entrada de su clon.
En primer lugar, porque la pareja protagonista de la cinta de Sonnenfeld funcionaba a la perfección (Will Smith y Tommy Lee Jones), mientras que aquí solo brilla Jeff Bridges, protagonista absoluto; actor mayúsculo aún parodiándose a sí mismo, a los héroes del western y a todo lo que viene en gana.
Su hilarante interpretación sí vale el precio de la entrada.
Bridges saca los mejores (y únicos) momentos estimables de la película, y suyo es el mérito de que el proyecto no se vaya, por completo, al garete.
Pero la otra cara de la moneda pesa demasiado: un pésimo Ryan Reynolds, estrella de rebote que se empeña, una y otra vez, en exhibir credenciales de actor televisivo con algún estallido de inteligencia (‘Buried’) ocasional; Kevin Bacon repite su rollo de siempre, y Mary- Louise Parker (aquí como improbable jefa de un improbable Departamento, inexpresiva por las cantidades industriales de bótox) consigue que añoremos ‘Weeds’, con lágrimas en los ojos.
Schwentke gestiona bien la acción del mastodonte digital, pero su Blockbuster carece de alma, y la sucesión de planos a toda velocidad, termina empachando. Tampoco ayuda el Libreto, tan estúpido que convierte en una tarea imposible llevar el barco a buen puerto.
Sosa, fácil, carente de química, tensión e incapaz de conectar al público con las peripecias de este tándem de aguerridos policías.
‘R.I.P.D. Departamento de Policía mortal’ no es la peor película del año… solo porque Bridges pasaba por allí.
Lo mejor: Jeff Bridges y el entramado digital.
Lo peor: todo lo demás.