En un futuro cercano, Theodore, un escritor solitario, consigue un nuevo sistema operativo basado en el modelo de Inteligencia Artificial y diseñado para satisfacer todas las necesidades del usuario. Para su sorpresa, se crea una relación romántica entre él y la voz femenina de ese sistema operativo.
Es maravilloso cuando una película toca lo más hondo de nuestro corazón. Cuando abandonamos la Sala pensando que no solo nos hemos divertido, sino que nos llevamos algo más de lo que trajimos con nosotros.
‘Her’ es la última pequeña gran obra maestra de Spike Jonze, que alumbra una comedia dramática sobresaliente, donde la fábula está siempre presente, dando amables lecciones sobre el mundo al que nos dirigimos… ¿o ya está aquí, tocando la puerta?
La alienación social, nuestra dependencia cada vez mayor de la tecnología, la aparente frialdad de las relaciones humanas 2.0; Jonze no escurre el bulto con las preguntas, pero tampoco pierde el norte sobre qué quiere contarnos.
‘Her’ es una sincera y conmovedora historia de AMOR entre un hombre normal y corriente (magnífico Joaquin Phoenix. Su Theodore es adorable, complicado, carismático, bello y llamado a engrosar el libro de grandes personajes del séptimo arte) y su Sistema Operativo (en la versión original y altamente recomendable, Scarlett Johansson vuelve a recordarnos por qué es una actriz maravillosa).
Cierto es que el planteamiento puede resultar propicio para dar rienda suelta a la descacharrante comedia de enredo, repleta de encuentros y desencuentros; pero todos conocemos a Spike Jonze. Sus películas están muy por encima de lo fácil.
El Director asume la realidad del Siglo XXI: nos guste o no, las relaciones han cambiado, y estamos a un paso de experimentar un nuevo tipo de amor que, en manos de Jonze, Phoenix y Johansson, resulta tan creíble, emotivo, agradecido y complicado como el tradicional.
Como colofón, el Director tiene el buen gusto de sugerir sin dar lecciones. En su experimento cinematográfico-sociológico lanza un millón de preguntas, dejando que cada uno de nosotros se haga cargo de las respuestas, interiorizando en el camino la magnitud de su obra.
Brillante de punta a cabo. Imprescindible para cualquiera que haya amado alguna vez, le hayan roto el corazón y se haya levantado de nuevo para volver a sentirse vivo.
Amor 2.0 sí. Pero AMOR.
Lo mejor: todo.
Lo peor: no tener a Theodore como amigo.
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