‘Hombres, mujeres y niños’ es un drama de perfil milenial. Es una historia coral sobre varios individuos, que son los niños y sus respectivos padres; y los diferentes efectos que internet ejerce en sus vidas. En principio los personajes se refugian en la red, cada uno a su manera, canalizando todos sus problemas personales, pero ¿se llegarán a enfrentar a ellos?
Esta es la nueva película de Jason Reitman (‘Up in the air’, ‘Juno’). La historia es interesante, la introducción de los personajes es clara y tanto la atmósfera creada, como el ritmo introspectivo de la historia, nos encauzan más y más en lo profundo del conflicto de base.
Reitman tiene suerte de tener a Eric Steelberg, su director de fotografía personal (‘500 días juntos’, ‘Juno’ y muchas otras). Indudablemente, los planos y la paleta de color de este largo son sobresalientes y el montaje, simplemente, nos arrastra dentro de un relato plural lleno de emails, mensajes de texto y páginas web.
Para este proyecto han contado con actores de primera categoría como Adam Sandler, Jennifer Garner, Rosemarie DeWitt, Emma Thompson o Dean Norris, entre muchos otros. Sin duda, es un elenco de lucimiento en el campo de la interpretación, en el que todos los actores claramente reflejan los conflictos de los personajes a los que dan cuerpo.
‘Hombres, mujeres y niños’ es un drama casi teatral. En principio, trata de darnos un mensaje de alarma con respecto a los avances tecnológicos que son ya parte de nuestras vidas. El director no niega los cambios en su comentario, sino que consolida una idea de ‘nuevo humano’. Un humano con mayor libertad, con mayor flexibilidad, que sigue callando sus penas más profundas y se busca consuelo en una realidad alternativa.
La crítica ha sido muy agresiva al respecto, no ha habido una buena aceptación desde el principio y todo fue por una mala interpretación. Repito las palabras de Reitman ‘Yo no queria hacer una película sobre internet, es irrelevante para mí’. Así que la película no trata de lo negativos que son las tablets en nuestras vidas, como dicen otros.
Sin embargo, si prestamos atención podremos discernir otros mensajes inherentes a sus estereotípicos personajes. Estos mensajes están narrados con voz en off y son bastante dogmáticos.
En resumen: la película predica como ‘buena’ la idea de un mundo en que los seres humanos (sobre todo personificados en el personaje de Adam Sandler) no deben llegar a lo profundo del problema, sino dejarlo ahí, es lo que es y punto. Así serán felices y alegarán todo lo que ocurre al ‘Universo’ y a lo ‘pequeños que somos’. Tenemos que amar nuestro mundo y estar conectados a a la vida real.
‘Pregunta: ¿vale la pena ver Hombres, mujeres y niños’? Definitivamente, es la única ópera que orquesta el panorama actual de principios de siglo y Reitman ha tenido las agallas de hacerla. La historia en sí está bien contada, los personajes producen cierta empatía y es muy conmovedora.
Lo mejor: las actuaciones. Las relaciones entre personajes y sus situaciones.
Lo peor: la voz en off. Reitman, a las audiencias no les gusta que les coman el coco.
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