Ben Burns regresa a casa con su familia en Nochebuena. Su desconfiada madre, Holly Burns, le da la bienvenida, pero pronto se da cuenta de que Ben no está bien. Durante las 24 horas que pueden cambiar sus vidas para siempre, Holly debe hacer todo lo que esté en su mano para que su familia no se derrumbe.
Una de las lacras sociales más silenciosas y terribles por las que puede pasar la familia es la drogadicción de alguno de sus miembros. Junto al alcoholismo, los abusos sexuales y la violencia o los malos tratos, son los principales detonantes que pueden marcar de manera decisiva a cualquiera para el resto de nuestras vidas. La desprotección, el arrinconamiento y la falta por no saber canalizar la situación suelen conducir al caos. Pero cuando se trata de un hijo que pasa por la fase de desintoxicación, los padres pueden desvivirse por intentar rescatar lo que más aman del oscuro pozo de las drogas.
‘El regreso de Ben’ pone la perspectiva desde el lugar de la familia que sufre internamente el dolor de tener un hijo perdido en el enmarañado y peligroso mundo de la toxicomanía. Al menos Ben puede contarlo, ya que para llegar hasta aquí otros han perecido, pero salir de la engañosa oscuridad y de un mundo de mentiras por conseguir una dosis no es un camino de flores.
Peter Hedges (’La extraña vida de Timothy Green’, ‘Como la vida misma’, ‘Retrato de April’), dirige y escribe esta dura realidad sobre el inesperado regreso de un hermano e hijo en pleno proceso de rehabilitación. Un regalo de navidad inmerso en sentimientos de recelo, sospechas y dudas mientras se aguarda el detonante que rompa con la paz del hogar.
En ese viaje por el confuso presente para reparar el pasado, el amor de una madre será crucial para recuperar su confianza ante el riesgo de perderlo definitivamente.
Julia Roberts (‘Magnolias de acero’, ‘Erin Brockovich’, ‘Agosto’), se interesa cada vez con más frecuencia por el papel de madre de hijos con problemas. En ‘Wonder’ daba alas y enseñaba a volar a su hijo pequeño frente a las diferentes malformaciones con las que había nacido. Ahora, en ‘El regreso de Ben’, debe atar en corto a su hijo adolescente en uno de los momentos más decisivos para afrontar la vida o su muerte. Una madre a prueba límite en un viaje de 24 horas por el dolor, el sufrimiento y la confianza. Amable y tierna, pero a la vez llena de tremendo rencor por quienes han facilitado sin miramientos que él tenga su letal adicción.
Lucas Hedges (‘Tres anuncios en las afueras’, ‘Lady Bird’, ‘Manchester frente al mar’), da réplica con la sobrecogedora interpretación de un chico perdido en la dualidad de salir definitivamente de la desintoxicación o seguir nadando entre mentiras para conseguir sus propósitos.
‘El regreso de Ben’ está llena de dureza, de tensión, de dudas. Sobre los efectos en el presente se va descubriendo el pasado en un pequeño barrio residencial aparentemente apacible donde todos se conocen desde pequeños. Testimonios y terapias de grupo con espeluznantes declaraciones sobre el antes y después para intentar pasar página. Es una travesía por las duras confesiones de un hijo a su madre y una madre que piensa en un hijo muerto y perdido cuando vive entre las drogas.
Pero también ‘El regreso de Ben’ denuncia la falta de recursos sociales para sacar adelante a adictos y enfermos marginales, que puede incitar a dar por perdidos a quienes traspasan ese cruel mundo, no por la dependencia en sí, sino por cómo llegar a conseguir la dosis necesaria sin importar qué o a quién se lleven por delante.
‘El regreso de Ben’ está llena de buenas interpretaciones para una temática llena de coraje, en la que una madre -sin preguntas- nunca abandona a su hijo en el purgatorio de los engaños.
Lo mejor: la dureza y el círculo vicioso que se describe, en una espiral de la que por desgracia no siempre se sale.
Lo peor: que la realidad suele superar a la ficción.
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