Una asombrosa historia de tres hombres que descubrieron por casualidad, a la edad de 19 años, que eran trillizos idénticos, separados al nacer y adoptados por diferentes padres. La feliz reunión de los trillizos en 1980 los catapulta a la fama, pero también pone en marcha una cadena de eventos que desentierra un secreto extraordinario e inquietante que va más allá de sus propias vidas y podría transformar nuestra comprensión de la naturaleza humana para siempre.
La primera premisa se halla cuando un joven de 19 acude por primera vez al colegio universitario Sullivan en la década de los 80, y le confunden con otra persona de idéntica apariencia. La segunda consiste en desvelar que esta pareja de hermanos había sido separada al nacer publicando los hechos investigados en un artículo del New York Post. La tercera premisa, a raíz de la noticia editada, es la aparición de un nuevo componente, pasando de gemelos a trillizos aparados desde su misma infancia.
Tim Wardle es un documentalista británico que consigue, tras dos intentos fallidos anteriores, sacar a la luz y desvelar la compleja trama que se esconde tras ‘Tres idénticos desconocidos’, y que pudiera recordar no tan remotamente la ficción novelística de Ken Follet en “El tercer gemelo”.
Para describir esta sorprendente historia recurre a los testimonios actuales de los hermanos rememorando cómo fueron aquellos tiempos en los que del concepto de ser únicos pasaron a ser un triplete inseparable. Se ayuda de la escenificación y la recreación con actores casi anónimos, vídeos familiares, fotografías reales y documentación aparecida en los diferentes medios de comunicación de la época, ayudando a la narración de estas “tres vidas separadas convertidas en una”.
Esta increíble y verdadera historia empujó a la fama y al circo mediático a Robert Shafran, Edward Galland y David Kellman, comenzando a diluirse por los excesos de ellos mismos. Tras la euforia, las familias adoptivas comenzaron a recelar de la responsabilidad del centro de donde salieron, el Louise Wise Services.
‘Tres idénticos desconocidos’ esconde misterios por desvelar sobre los experimentos del psiquiatra Peter B. Neubauer, en la citada institución, para investigar sobre los efectos de la información genética y cómo interactúa el entorno en la voluntad del individuo. Es un documental inquietante, no solo por las consecuencias propuestas, la desprotección judicial, o la impotencia de sentirse marioneta de un cruel estudio, sino por dar rienda suelta a la imaginación sobre qué otras terribles investigaciones se pueden llevar a cabo con el pretexto de conocer mejor la psique humana.
‘Tres idénticos desconocidos’ es una truculenta historia de abducción, cuyo escalofriante silogismo se basa en que la premisa mayor destroza la vida de tres individuos (o de no se sabe cuántos más con exactitud); la menor no esclarece si la información del ADN prevalece o no sobre el ambiente; y lo difuso de su conclusión no justifique en ningún caso disponer de vidas orquestadas y secuestradas de su propia naturaleza.
Lo mejor: que de una sorprendente historia de reencuentros pase a la desconcertante y misteriosa trama experimental con gran acierto.
Lo peor: las inquietudes conspiratorias que puede generar la oculta realidad.