Lionel Frost, investigador dedicado a mitos y monstruos, descubre a una extraña y amable criatura, la última en su especie, a la que llama Mr. Link. Junto a Frost, Mr. Link se embarcará en un apasionante y divertido viaje dispuesto a encontrar a sus primos los Yeti, desaparecidos tiempo atrás. Contarán con la ayuda de Adelina Fortnight, una aguerrida aventurera que tiene el único mapa conocido con la ubicación de los Yeti. Juntos afrontarán toda serie de peligros para llegar a su destino.
Hablar de animación siempre conlleva esfuerzos casi titánicos para que una película salga adelante. Los dibujos han dado paso a las pantallas digitales donde el trabajo es más accesible y permite un mayor control sobre el proceso de producción, y de ahí han saltado al 3D para crear efectos visuales combinados con acción real. De Disney a Pixar, hasta llegar al ILM (Industrial Light & Magic). Aunque hay otras tantas compañías más.
En lo referente a la animación stop-motion (con movimiento foto a foto), la complicación se multiplica por las miniaturas, los decorados, la parafernalia y los impedimentos técnicos, que la convierten en un oficio puramente artesanal. Henry Selick, Nick Park, Peter Lord, Tim Burton, Wes Anderson, entre unos cuantos más, forman parte de ese grupo romántico que han realizado bellísimos ejemplos todavía latentes en la retina del espectador. Aardman y Laika, son los emblemáticos estudios que permanecen ofreciendo este tipo de producciones de manera regular, y en concreto, este último en manos de Travis Knight, es responsable de esta quinta entrega, una impecable y perfecta joya técnica titulada originalmente ‘Missing Link’.
Tres años después de ‘Los mundos de Coraline’, Chris Butler presentaba su primera película ‘El alucinante mundo de Norman’, en el 2012. Un par de años más para el estreno de ‘Los Boxtrolls’, y ya en el 2016 ‘Kubo y las dos cuerdas mágicas’. Mucho han cambiado los materiales con los que ahora se imprimen las miles de diferentes facetas expresivas para cada uno de los personajes hasta llegar a animar ‘Mr. Link. El origen perdido’.
Butler escribe y dirige este asombroso relato visual que podría definirse como el mejor Indiana Jones de la animación. Una completa historia que da la vuelta por el mundo en ese oficio romántico del aventurero en busca de nuevas especies. Siguiendo las huellas de Darwin, las élites científicas británicas persiguen descubrir el catálogo de seres vivos que habitan hasta en el último centímetro cuadrado del planeta. Y Lionel Frost, no puede abandonar la idea de pertenecer al selecto club de la “Fraternidad de Aventureros”, descubriendo seres mitológicos aunque para ello tenga que tocar la gaita con ánimo de amansar las fieras.
Frost es una pequeña caricatura del gran showman Hugh Jackman. Una mezcla entre el aventurero del látigo y sombrero, la excentricidad de Holmes, y el egocentrismo de ambos, servido en los mejores escenarios que Verne pudiera imaginar. Y hay que reconocer que el mérito de Arturo Valls en su doblaje haga que apenas sea perceptible su identificación.
Y para tamaña épica a escala de muñequitos, no podían faltar por descubrir un compañero de andanzas a modo de un grandioso e ignorante Watson peludo y, por supuesto, una fémina decidida a vivir sus propias aventuras y encontrar su lugar en el mundo. Mr. Link (interpretado en original por Zach Galifianakis, Brays Efe en la versión castellano), aprovechando la documentación del antiguo asistente y en honor al eslabón perdido, es todo un encanto de engendro por descubrir, y Adelina (Zoe Saldana/Maggie Civantos), una mujer independiente, decidida y muy segura de lo que quiere, que se abre camino a patadas en unos “tiempos oscuros: la electricidad, las sufragistas y la evolución”.
Le sobra razón a Chris Butler cuando define a esta miniatura animada como si “David Lean dirigiera ‘La vuelta al mundo en 80 días’ protagonizada por Laurel y Hardy”. Es irónicamente ambigua y desborda buen humor con segundas intenciones. Es fastuosa, divertida, entretenida y repleta de mil detalles que pasan desapercibidos y contribuyen a hacer olvidar que estamos disfrutando de una película de animación.
Si en su momento, para quien estas palabras suscribe, ‘Spider-Man: Un nuevo universo’ fue la mejor película de animación del año pasado, tras disfrutar de esta verdadera joya, mucho tiene que sorprender cualquier potencial competidora para arrebatar la sensación de que ‘Mr. Link. El origen perdido’ sea la mejor opción del actual.
Lo mejor: los personajes, sus movimientos, y la gallina. Sin olvidar esa perla final de los títulos en la que se muestra cómo se ha realizado una de las secuencias, tan característica del estudio Laika.
Lo peor: que no se valore lo suficiente el trabajo casi titánico que conlleva una producción con tal combinación de técnicas cinematográficas.