Ambientada en los vibrantes paisajes del sur de Florida narra el viaje emocional de una familia afroamericana afincada en las afueras de la ciudad –y encabezada por un padre dominante lleno de buenas intenciones– que, tras una grave pérdida, debe abrirse camino entre el amor, el perdón y la unión.
En alguna ocasión, a lo largo de la vida, hay pequeños acontecimientos que pueden prender la chispa del cambio. Decisiones que arrastran situaciones insospechadas e incontroladas que pueden generar el drama de la ruptura con lo que tenemos, y hacen estallar el conflicto en mil pedazos. Cuando percibes la drástica e incomprensible experiencia buscas desesperadamente un botón al que pulsar para volver cinco minutos atrás y cambiar todo lo ocurrido. Pero no hay camino de regreso ese mal trago.
‘Un momento en el tiempo – Waves’ es eso. Oscilar en el fluido que es la vida, unas veces más arriba en la onda otras algo más abajo. En ese mantenerse a flote que es la experiencia de vivir, no siempre las olas vienen con la misma intensidad, y a la menor de cambio, si no se tiene suficiente preparación, el bote puede zozobrar y dar un vuelco inusitado.
El guionista y director Trey Edward Shults (‘Llega de noche’, ‘Krisha’), esboza una reflexión sobre esos momentos que te cambian por completo toda la existencia. Una cosa lleva a otra, y ésta a la siguiente… Una cadena de diferentes momentos en la que puede engarzarse el drama a causa de un eslabón equivocado. Como en una bici (bello arranque inicial y final), la vida se pedalea manteniendo el equilibrio y sin marcha atrás.
Dos historias yuxtapuestas de un hermano desbocado y una hermana esperanzada en que la familia recupere sus lazos. La competitividad y exigencias de los padres por preparar a los hijos se pueden convertir en la desesperación de estos por no fracasar a ojos de los primeros. Kelvin Harrison Jr, Sterling K. Brown, Taylor Russell, y Renée Elise Goldsberry, son los componentes de esa familia; Alexa Demie y Lucas Hedges, los jóvenes allegados. Magníficas interpretaciones con geniales resultados que te mantienen en el frenético filo de la angustia.
Para mostrar esta atmósfera, Trey Edward Shults es capaz de conjugar la nerviosa inquietud de la cámara con los diferentes formatos de pantalla que parecen enjaular y angustiar a sus protagonistas. Cuenta con una potente y atronadora banda sonora firmada por Trent Reznor y Atticus Ross, que acompaña a los diferentes estados anímicos de los personajes. Sin olvidar la cuidada fotografía a cargo de Drew Daniels.
‘Un momento en el tiempo – Waves’ habla de tener una familia y llegar a perderlo todo. Pero sobre todo adoctrina, como el sermón religioso del predicador, en que el amor siempre combate al odio. Y que saber entender el perdón (que no la redención como borrón y cuenta nueva), puede significarlo todo para aceptar al resto tal y como somos.
Lo mejor: su excelente espíritu para demostrar que nadie está a salvo de revocar su propio destino.
Lo peor: ese difuso mensaje que se encuentra muy por encima de familias adineradas acostumbradas a esas despreocupadas fiestas americanas de jóvenes en grandes mansiones americanas, vidas que también pueden distorsionarse por los acontecimientos del drama doméstico.