Bresson Diary es el único tesoro que el legendario ladrón de guante blanco Arsenio Lupin no pudo robar en toda su vida. Según la leyenda, aquel que sea capaz de desentrañar sus secretos podrá adquirir una inmensa fortuna. Tras poner los ojos en ese objetivo legendario, Lupin conoce a Leticia, una joven que ama la arqueología, y ambos deciden trabajar juntos para resolver el misterio. Sin embargo, Lambert, un investigador de una organización secreta que también busca el Bresson Diary, y Gerald, un hombre siniestro que mueve los hilos de la organización se interponen en su camino. ¿Cuál es la sorprendente verdad oculta tras Bresson Diary? Desde París hasta México pasando por Brasil… ¡Da comienzo una caza del tesoro a una escala mundial sin precedentes!
Kazuhiko Katô fue uno de los grandes maestros mangas que ha dado la novela gráfica. Desde 1967, las generosas aventuras de su personaje Lupin III han acompañado la imaginación y la fantasía de diferentes generaciones de todo el mundo. Desde las páginas, sus series televisivas, hasta las películas cinematográficas, este singular héroe de guante blanco siempre ha salido airoso de cualquier percance.
En este juego del gato y el ratón, del Coyote y el Correcaminos, del Inspector Clouseau y la Pantera Rosa, hay un aire retro ingenuo, inverosímil, divertido y espectacular que envuelve de igual modo la atmósfera de las correrías de Lupin. Monkey Punch (el perpétuo pseudónimo con el que aguantó su creador y que nunca fue de su agrado), dejó muy claro su deseo de que “me gustaría seguir enviando a Lupin de aventuras por todo el mundo” antes de que falleciera en abril del 2019. Dicho y hecho. En esta ocasión, y por vez primera, en animación 3D con un resultado magnífico sin perder el espíritu original de los caracteres.
Takashi Yamazaki posee dilatada experiencia en la dirección de películas de acción (‘Space Battleship Yamato’), de animación (‘Friends: Aventura en la isla de los monstruos’), o en la conversión de las dos dimensiones en CGI -imagen generada por ordenador, más real y tridimensional- (como es el caso de las dos entregas de ‘Stand by Me Doraemon’). Además se ha responsabilizado del guión inspirado tanto en el original del novelista francés Maurice Leblanc, como del sucedáneo gráfico del legado japonés de Katô (quien además llegó a dirigir ‘Lupin III: Dead or Alive’).
El resultado es ‘Lupin III: The First’, el primero de esta nueva generación, que recoge el alma de innumerables cómics, series, películas y videojuegos que le preceden.
La tecnología y el discurso visual dan rienda a las más sagaces e insólitas escenas en las que Leticia, una joven y cándida arqueóloga convertida en ladrona con escrúpulos, cruza su camino con el genio de las burlas y la diversión por el placer de robar lo que se proponga. Ambos, que comparten ancestros de tercera generación como maestros del ingenio, se servirán de la arqueología y el engaño para descifrar lo que esconde el Diario de Bresson, un tesoro eclipsado por el misterio y por la amenaza para toda la humanidad.
Emboscadas, trampas, y persecuciones por todo el mundo resolviendo rompecabezas a la altura de una especie de Indiana Jones animado, delgaducho y con traje ajustado, ambientado en los sesenta. Eso sí, acompañado de sus habituales compinches, Jigen el pistolero certero, Ishikawa el samurai infalible, y la sensual y caprichosa Fujiko. Sin olvidar a Zenigata, el perenne y pertinaz inspector con quien comparte Lupin rivalidad y desventuras por ver quién se sale con la suya.
‘Lupin III: The First’ es el resultado de un gran trabajo que satisfará a la legión de seguidores del personaje en esta nueva singladura, aunque algo distante de las andanzas salidas de la pluma y puño de Katô, y menos de las de genial Miyazaki. Pero merece y mucho la pena disfrutar de este revival que mantiene la tradición y filosofía de las series y los personajes.
Lo mejor: el regreso de una de los grandes personajes animados del sol naciente, con más pompa que circunstancia, y la continuidad del elenco artístico de los cómics, series y OVAs, películas al servicio de este ladronzuelo de corbata amarilla.
Lo peor: que las habituales y enrevesadas tramas queden un tanto relegadas en favor del nuevo diseño visual de la tira.