La historia medieval de Sir Gawain y el caballero verde contada desde el punto de vista del género de la fantasía.
Incluso en sus propuestas más accesibles y comerciales (‘Peter y el Dragón’), el cine de Dawid Lowery siempre se ha caracterizado por retar al espectador, darle algo diferente que o bien le incite a reflexionar, o bien le provoque y despiste con lo inesperado, lo que conlleva el reconocimiento que un cineasta arriesgado merece… o la condena por rizar demasiado el rizo, sacrificando a parte de la audiencia en el camino.
‘El Caballero Verde’ puede jactarse, sin lugar a dudas, de ofrecer una visión arriesgada, mística y provocadora de una parte importante de la manoseada leyenda artúrica.
La historia de este Gawain (probablemente, la mejor interpretación de Dev Patel hasta la fecha, y más si tenemos en cuenta que apenas tiene guión con el que trabajar su personaje) tan carismático como acomplejado, inconsciente, perdedor, adicto a ahogar sus penas en alcohol y anhelante de hacer algo y SER algo en la vida de una corte legendaria, se desarrolla con (a ratos, excesiva) lentitud, apoyándose en el impacto de las imágenes, el viaje interior del atribulado héroe y la mágica, hechizante y portentosa atmósfera.
Todos los aspectos técnicos y artísticos de ‘El Caballero Verde’ son brillantes: desde su maravillosa fotografía y su imaginativo diseño de producción, pasando por la escalofriante banda sonora, el ejemplar maquillaje, los efectos visuales y prácticos y el fantástico (en todos los sentidos) vestuario.
Si se acepta la propuesta desde el principio (Lowery deja muy claro que su película es distinta al resto de encarnaciones artúricas) ‘El Caballero Verde’, hará las delicias del espectador, pero obligándole a implicarse poco a poco, caminando con Gawain hasta el final de su relato que es, también, el mejor desenlace de puro cine fantástico que hemos visto en los últimos años, impregnado de espíritu aventurero en el mayor y más peligroso de los viajes: el de la vida y las decisiones que tomamos (o no), durante ella.
Pero, como gran parte de la filmografía de este cineasta tan personal, habrá espectadores que, legítimamente, no compren la propuesta, pensando que Lowery les ha dejado de lado, haciendo la película para él, olvidándose a ratos de que hay personas sentadas en las butacas o la comodidad de sus hogares, esperando una recompensa inmediata por su tiempo.
Cada uno deberá juzgar, como espectador soberano, qué obtener de esta fascinante película.
Para quien esto escribe, hay tanto poder en cada imagen, en las majestuosas interpretaciones, en el embeleso de lo que se dice y (sobre todo), lo que no se dice, que ‘El Caballero Verde’ merece un puesto de honor en el cine fantástico, abrazando la diferencia y haciendo de ella… Arte.
Lo mejor: es tremendamente original.
Lo peor: se aleja de visiones anteriores de la leyenda medieval, lo que puede espantar a más de un espectador.
Comentarios
Post relacionados
