El destino de un mediocre grupo de desgraciados comienza a converger lentamente mientras se desmorona. Joong Man va tirando a duras penas trabajando en una sauna y cuidando de su madre enferma, hasta que encuentra en el vestuario una bolsa llena de dinero. Tae Young se ha metido en un lío porque su novia se ha dado a la fuga con el dinero que él le había robado a un prestamista. Además, aparece misteriosamente un cadáver. Mi Ran, acorralada entre su marido maltratador y su vulgar trabajo de camarera, empieza una relación con su joven amante, Jin Tae, quien se ofrece a matar a su pareja… Así empieza este juego en el que solo puede sobrevivir el más fuerte.
Las restricciones de cuotas en el mercado de cine surcoreano que favorece la producción nacional sobre la extranjera ha dado sus frutos. El hecho de que sus propias películas hayan batido récords de taquilla sobre las grandes superproducciones norteamericanas lo dice todo.
‘Oasis’ de Lee Chang-Dong, ‘Oldboy’ de Park Chan-Wook, ‘Memories of a murder’ de Bong Joon-Ho, o las más recientes ‘Burning’ de Lee Chang-Dong, ‘Train to Busan’ de Yeon Sang-Ho y ‘Parásitos’ también de Bong Joon-Ho, son unos cuantos ejemplos que han sabido trascender de sus propias fronteras.
Tras el parón pandémico, llega con cierto retraso esta afortunada cinta con guion y dirección del debutante Kim Yong-Hoon. Acierto y efectividad, son las grandes características de esta película que adapta la novela de Keisuke Sone traducida algo así como “Bestias arañando la paja”.
‘Nido de víboras’ hace alarde del propio título, tanto del original como del adaptado. Un entramado de personajes encerrados en un argumento cínico. Es una simpática comedia negra estructurada por interesantes capítulos que nos hacen seguir la pista de un bolso Louis Vuitton con fajos de billetes de wones surcoreanos. A lo largo de la trama, el preciado y codiciado botín va pasando de mano en mano caprichosamente. Bueno, mejor dicho como golpe de suerte, además de la referencia de la famosa marca de cigarrillos Lucky Strike.
Las víboras a las que hace referencia son las ocho figuras del cartel. Ocho personajes corales unidos por la codiciosa suma encontrada en la taquilla 47 de una sauna de hotel. Personajes que simulan el canibalismo uterino del tiburón toro. Jeon Do-Yeon, Jung Woo-Sung, Bea Sung-Woo, Jeong Man-Sik, Jin Kyung, Jung Ga-Ram, Kim Jun-Han y Youn Yuh-Jung ganadora del último Oscar como actriz de reparto por ‘Minari’. Todos ellos asombrosos en sus roles.
‘Nido de víboras’ es una excelente oportunidad para adentrarse en ese sorprendente cine coreano (del sur, es evidente; en el norte todo es patriotismo y propaganda), con chicas al poder, matones sin escrúpulos, y algún pardillo que otro intentando solventar los problemillas de la vida de un plumazo. Muy recomendable por su magnífica combinación entre la calidad y el entretenimiento.
Lo mejor: la historia argumental, y sus juegos en el tiempo mientras se incorporan los personajes y se ata el círculo.
Lo peor: que se pierdan detalles por el camino ante la enrevesada aventura de sus protagonistas.