Miles Morales es un adolescente afroamericano y puertorriqueño de Brooklyn que intenta integrarse en un nuevo instituto privado en Manhattan. Su padre es un agente de policía como manda la ley y su madre una competente enfermera. Ambos son afectuosos, orgullosos de los logros de su hijo y quieren verlo triunfar en su nuevo instituto para estudiantes dotados. Pero la vida de Miles se complica aún más cuando es picado por una araña radioactiva.
El universo de Marvel se expande. Cuando todos los focos de atención cinematográfica están dirigidos hacia la conclusión del serial de superhéroes de acción real, tanto en plan individual como en su amalgama de los Vengadores, una pequeña y peculiar araña ha vuelto a hacer de las suyas.
Sony revivió con enorme acierto la mejor versión de un Peter Parker adolescente con ‘Spider-Man: Homecoming’, aprovechando su magnífico paso por ‘Vengadores: Civil War’, tras el acuerdo conjunto entre las productoras que detentan sus derechos. Y próximamente lo traerá de regreso en su segunda entrega ‘Spider-Man: Far from home’.
Para poder superar la espera, llega esta auténtica joya animada, destinada a ser la mejor producción de animación del año y posiblemente la mejor película que haya salido del sello Marvel hasta el momento.
‘Spider-Man: Un nuevo universo’ es la adaptación de las últimas ideas de este sello de superhéroes, llevada a la gran pantalla en un lenguaje completamente innovador. El archiconocido trepamuros coincide en el mismo espacio y tiempo con seis versiones totalmente dispares de épocas y universos diferentes. Y para quienes no conozcan este “ultimate” cómic que nació en 2011 de las manos de Brian Michael Bendis y Sara Pichelli, no hay problema, ya que la misma película lo explica todo con magnífica coherencia. Cuando los personajes de las páginas parecen agotar sus aventuras, éstos se tuercen y retuercen en universos paralelos llegando a tomar contacto entre sí.
Avi Arad, quien fuera anteriormente presidente de Marvel Studios, produce esta cinta de animación junto a Amy Pascal (productora de las nuevas entregas protagonizadas por Tom Holland en solitario, y de ‘Venon’), y la pareja formada por Christopher Miller y Phil Lord, sobre la historia de este último. Muy atrás queda la malograda experiencia a bordo del Halcón Milenario, pero muy alta dejaron las versiones animadas inspiradas en las piezas desmontables del mundo Lego.
Miller y Lord son los verdaderos artífices de llevar a cabo esta magna empresa, necesitando la colaboración en la codirección a Bob Persichetti, Peter Ramsey y Rodney Rothman, salidos de Disney, Dreamwork y Aardman, entre otros.
‘Spider-Man: Un nuevo universo’ abre la puerta a una nueva dimensión de la animación. Tiene la textura de un cómic, con todos sus recursos y más. Es una película realizada en un casi imposible 3D, combinando trazos del lápiz de la animación más tradicional y distorsionando los fondos premeditadamente. Además juega con diferentes tiempos en la captura de los movimientos de sus personajes, mientras deambulan por los escenarios en los que la cámara parece disfrutar de las persecuciones desenfrenadas. Se intercalan caprichosamente las dimensiones animadas y se rompen todos los esquemas visuales con un resultado realmente espectacular.
A esta espectacularidad y a la singularidad de la imagen hay que añadir un sonido impecable. Los actores que prestan sus voces a los personajes en la versión original son de la talla de Hailee Steinfeld, Lily Tomlin, Zoë Kravitz, Mahershala Ali, Liev Schreiber, Nicholas Cage o Chris Pine. Y su estupenda banda sonora corre a cargo de Daniel Pemberton.
En esta nueva entrega digital del hombre-araña, hay cabida para cameos, homenajes a las anteriores aventuras del personaje, y hasta burlas sobre los derechos para decir conocidas frases de otros personajes. Pero también deja un mensaje claro de que cualquiera puede sentirse un superhéroe en lo que hace con respecto a los demás. Cualquiera puede ser Spider-Man.
Este nuevo universo es frenético, es divertido, es audaz y, sobre todo, es brillante. Como película de animación es una auténtica joya nunca vista. Su argumento es sorprendentemente fabuloso, yendo mucho más allá del mito del Peter Parker neoyorkino.
¡¡¡Spider-Man ha muerto… Larga vida a Spider-Man!!!
Lo mejor: todo. Y que se puede confirmar una próxima segunda entrega. Atención a las escenas post-créditos.
Lo peor: que el embelesamiento de verla solo una vez produzca una sensación de que no se disfrute con plenitud, surgiendo la imperiosa necesidad de un nuevo visionado.
Comentarios
Post relacionados
