Edu Ferrés, joven promesa del mundo de la interpretación

En primer lugar, Edu, cuéntanos: ¿cómo empezaste en el mundo de la interpretación?

Yo, realmente, cuando era muy pequeño, empecé en el Conservatorio de Tarragona tocando el piano y la batería en el solfeo, pero enseguida vi que eso no me acababa de tirar mucho. Yo siempre he sido el graciosete del grupo, y me picaba la curiosidad por ser actor, así que probé suerte en un taller de teatro de Tarragona, El Magatzem, Ahí cada año se hace un taller y se representa una obra distinta; vi que eso era lo mío y no dudé ni un segundo, así que dejé el Conservatorio y empecé a centrarme en el teatro. Realmente, donde empecé a interpretar profesionalmente fue en el parque temático Port Aventura, y ahí aprendí muchas cosas, aunque también hice cursos: por ejemplo, uno de clown en Barcelona con Jango Edwards, otro con la compañía de teatro La Cubana (se hacían castings para seleccionar a los alumnos)… Pero yo, realmente, empecé haciendo teatro amateur, después me profesionalicé en Port Aventura… Aprendiendo en cada trabajo; ¡la experiencia que te da cualquier trabajo como actor es inigualable!

Supongo que debes de estar pletórico después de tu experiencia en Telecinco. ¿Cómo llegaste a “La Pecera de Eva”?

Lógicamente, ha sido una experiencia buenísima: ¡de hecho, para mi es la mejor! He llegado ahí gracias a mi representante (Nota del entrevistador: La representante de Edu es la prestigiosa representante Elvira Gallo, que tiene en cartera a Blanca Portillo, Angel Pardo y a Esmeralda Moya, entre otros/as). Tengo una representante estupenda, en Madrid… Y bueno, hizo lo que todo representante, buscarme pruebas, castings… En febrero de este año, hice una prueba para “La Pecera de Eva”, que era para un papel más secundario en la misma serie. Los directores quedaron bastante contentos, y me propusieron, de cara a la tercera temporada, interpretar a un personaje de mayor peso que encajara con mi perfil. Pasó el tiempo, y me citaron el 10 de junio para hacer otro casting, esta vez, para el personaje de Andrés. Salió bien, y he pasado todo el verano grabando. Fue increíble, muy bonito.

Pues es un poco bipolar, ¡o tripolar, casi! (Risas) Andrés, para los que hayan visto la serie, es una persona muy influenciable, sin apenas personalidad. Cuando está con Malik, se comporta de manera radical… Es el malote de la clase, el graciosillo. Pero, cuando está con Eva, la psicóloga del instituto, ya es diferente, ya cambia su posición: sigue siendo chulo, pero ya se ve ahí un pequeño cambio. Se ve, incluso, a la defensiva. Cualquier cosa que le diga Eva, siempre saltará, siempre recurre al insulto… Y luego está la verdadera parte de Andrés, que es un trozo de pan. Era muy buen tío, tenía una relación muy buena con sus padres, y había sido un buen estudiante, con buenos amigos (como Jaime, su mejor amigo), sacaba buenas notas, se relacionaba con buena gente… ¡Era un tipo normal, vaya! Eso fue hasta que se cruzó con Malik, ahí la cosa cambió. Y es que las amistasdes influyen muchísimo a Andrés.

Si tuvieras que hacer un balance sobre esta experiencia, ¿sería positivo o negativo?

Sería positivísimo. Pensad que para mi “La Pecera de Eva” ha sido el primer trabajo profesional en televisión, y ante la cámara ha sido uno de los primeros. Entonces, claro, aparte de a darlo todo, porque es nuestro trabajo, vas a aprender: estás con cuarenta mil ojos, con cuarenta mil orejas, pendiente y aprendiendo de absolutamente todo. Me ha tocado la lotería de poder trabajar con gente estupenda como Alexandra Jiménez, la actriz que interpreta a Eva, y también con actores jóvenes como Nacho Aldeguer, María Hervás… Me interesa muchísimo trabajar con gente joven como yo, absorber su capacidad de reacción… Eso ha sido el mayor punto positivo. Negativo… ¡No he tenido ni uno! Así que el balance está muy descompensado: gana la parte positiva.

Y, ya para acabar, ¿tienes algún proyecto pendiente?

Bien, la vida del actor es muy inestable. Entonces, no me atrevería a decir si sí o si no, porque no lo sabes hasta el último momento. Alguien te puede decir “Oye, que para el mes que viene te asignamos este proyecto”, y luego caerse, o no… Son cosas muy variables. Por eso, prefiero no decir nada antes de tiempo, sino vivir el momento. ¡Ya vendrá! Ahora mismo estoy coordinando espectáculos y disfrutando en Port Aventura, deseando volver a Madrid a rodar… Pero tiempo al tiempo, que las cosas vienen solas, y que, con esfuerzo y si realmente crees en algo, eso se cumple. Es mi filosofía y mi religión.

¡Muchísimas gracias por esta entrevista, Edu!

¡De nada, a ti! Un saludo para Noche de Cine.