‘Skyfall’: Una imagen vale más que 1000 palabras

La lealtad del mejor agente de los servicios británicos, James Bond, hacia su superiora M se verá seriamente puesta a prueba cuando el pasado de ella vuelve para atormentarla. El MI6 sufre un ataque, y 007 debe localizar y destruir la amenaza, liderada por el villano Silva, y en la que contará con la ayuda de la agente Eve.

Había algo en ‘Casino Royale’ que me indicaba que no estábamos ante el típico James Bond (algo más que el cuestionado pelo rubio de Craig). Sería el choque de ver a Bond magullarse o pelear por el amor de una chica por la que caer rendido a sus pies que hizo que, para mí, sea la mejor película del agente 007 jamás hecha. Tras ‘Quantum Of Solace’ (que gustará más o menos depende de con quién hables cuando el único problema que tiene es haber sido estrenada después de Casino) le llega el turno a ‘Skyfall’, con la mano de Sam Mendes en la dirección.

Lo primero de lo que uno se da cuenta al ver el film es de la impecable fotografía de toda la película. ¡Maldita sea! Pelea a contra luz en edificios de China (que me recuerda a una película de Michael Mann), el uso de los colores (el fuego final recreando el juego de siluetas, el amarillo fuego en la cara de un Silva que busca venganza o el azul de los edificios y puentes de Shangai) todo me hace indicar que estamos viendo una impecable película de acción, perfectamente dirigida por un director de orquesta con estilo: Sam Mendes.

De lo segundo que uno se da cuenta es del impresionante buen hacer de dos actores de primera división. Si, sabíamos que Javier Bardem era bueno y ‘Skyfall’ no nos lo va a descubrir. En 30 minutos de película (me atrevería a decir que solo con la impresionante primera aparición ya nos ha conquistado) es capaz de dar vida a un villano que, sobre el papel, es bastante impersonal. Si no fuese por la creación de Bardem, en manos de otro actor probablemente quedaría como un villano del montón. Bardem le logra dar un plus.

¿Y Craig? Pues olvidando sus últimos fracasos en taquilla y verificando mi confianza en él, vuelve a ratificar lo que hemos hablado en las secuelas anteriores: ES EL MEJOR JAMES BOND DE LA SAGA. Final de la discusión.

¿Qué pero le encontramos pues a tan magnífica velada? Fallos de ritmo. Estamos asistiendo a un espectáculo tan sumamente bello por la fotografía antes mencionada que podemos quedarnos absortos mirando a la pantalla grande sí, pero también es cierto que ‘Skyfall’ empieza a todo trapo con una persecución inicial genial, que luego pone las cartas sobre la mesa y va sentando las bases de la acción con mucha clase sí… pero también es cierto que Mendes se lo toma con calma para contarnos lo que pasa e incluso no faltan las referencias a la saga (Ahí está el mítico Aston Martin DB5 que ya condujo Bond en ‘Goldfinger’, 1964). Esto hace un contraste de ritmo brutal que termina con un clímax final que es todo lo que esperábamos de ‘Skyfall’ y más. ¿Y más? Sí, pues sentamos las bases de lo que será la franquicia de aquí en adelante (y hasta aquí puedo leer).

Lo único cierto es que la franquicia está muy viva. Bond, siga trabajando.

Lo Mejor: La impresionante fotografía del film.

Lo Peor: Los altibajos en el ritmo.

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