Solo tenéis que recoger a un chaval en Jersey y llevarlo a Washington. No puede ser tan difícil. ¡No será tan difícil!
Doce años después de la última entrega, tal que un viernes 7 de septiembre de 2007 se estrenaba en España ‘La Jungla 4.0’ de Len Wiseman. Un film que pretendía juntar a nuevos fans de la saga con los fans de toda la vida, que funciona más como homenaje a esos films (y que en mi opinión es mejor que la segunda entrega, pero inferior a la tercera) que como película de acción pura y dura.
Pero empecemos desde el principio. Muchísimo tiempo estuvo rondando las mentes de los productores de la Fox el realizar una cuarta entrega de una de las franquicias que más dinero les había aportado. Pronto se dieron cuenta de que, si tardaban más, Willis estaría demasiado viejo para poder protagonizarla. Así, ojearon el panorama de directores actual y optaron por elegir al prometedor Len Wiseman (director de la saga ‘Underworld’ y fan acérrimo de la saga) para ponerse tras las cámaras.
Y aunque la idea de encuadrar a McClane, policía de la vieja escuela, en un mundo dominado por los ordenadores (un dinosaurio en una era digital) era más que prometedora, el excesivo uso de los CGI dañó la estructura de una saga echa «a la vieja usanza». Es cierto que cuando mencionas el film la gente sigue hablando del helicóptero atravesado por el coche de policía, o de ver a McClane colgado de un ala de un avión… pero también está la sensación de que se podían haber hecho mucho mejor las cosas. Como decimos, ‘La Jungla 4.0’ es un digno homenaje a la saga.
En esta ocasión McClane debe lidiar con un enemigo que ataca la infraestructura de ordenadores que controla todo tipo de comunicaciones, transportes y energías. Acompañado de un hacker que ayudó a perpetrar el asunto (pasable Justin Long) tendrá que dar caza al terrorista que está detrás de todo esto visto que, una vez más, la policía está superada por todo lo que está sucediendo.
A veces pienso que las películas de ‘Jungla de cristal’ son como los villanos a los que se enfrenta McClane. En la primera entrega era el elegante megalómano Hans Gruber (genial y memorable Alan Rickman). En la segunda el serio Coronel Stuart y el General Esperanza eran tipos serios pero eficaces (Franco Nero y William Sandler tenían al menos un físico imponente). En la tercera regresa la elegancia de los Gruber con Simon y su macabro juego (mítico Jeremy Irons). En ‘La Jungla 4.0’ Thomas Gabriel es un clásico villano del Hollywood actual. Es malo sí, pero da la impresión de que es un niño enrabietado (Timothy Olyphant, muy lejos de lo que en realidad sabe hacer).
Así pues llegamos al final del repaso y nos toca ver y evaluar la siguiente entrega: ‘Jungla de Cristal: Un Buen Día Para Morir’. ¿Qué me espero de ella? Simplemente que no me defraude. A estas alturas, para que nos vamos a engañar, hay poco que puedan hacer con el personaje de McClane para que me pille por sorpresa así que con que me den un entretenimiento digno, al nivel de la segunda entrega, me basta y me sobra. Menos sería una auténtica cagada.
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